Rigoberto y Claudia Reyes

Enfoque ministerial

Rigoberto fue designado para el ministerio en Nicaragua en 2001 e inmediatamente partió para el campo, dependiendo únicamente de los ingresos de Claudia hasta que pudieran recaudar su sustento. Desde su nombramiento muchos han llegado a conocer al Señor, se han desarrollado líderes, y se han iniciado grupos celulares, ministerios de niños y cárceles. Rigoberto está plantando cadenas de nuevas iglesias usando los principios de extensión de II Timoteo 2:2: "Y lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros." Fue nombrado Director del Ministerio de Centroamérica en agosto de 2011. En junio de 2020 fue nombrado Director del Ministerio Internacional, ampliando sus áreas de supervisión a México, América Central, el Caribe, América del Sur, África y Asia Central.

Historia de fe

Rigoberto nació de un padre ateo, constructor, que mucho más tarde se hizo cristiano. Circunstancias externas hicieron que Rigoberto se trasladara a Nicaragua con su padre y sus hermanos mayores, mientras que su madre permaneció en Honduras con los hermanos menores. En 1995, después de una carrera en agricultura y administración, él y su esposa Claudia, mientras vivían en La Ceiba, Honduras, fueron invitados por el misionero de Missions Door, Humberto Del Arca, a asistir a un encuentro de enriquecimiento matrimonial. Allí conoció la gracia de Dios, "justo lo que había estado buscando en los lugares equivocados durante mucho tiempo". Aceptó a Cristo como su Salvador y comenzó a estudiar la Biblia con Humberto Del Arca. En 1998 el huracán Mitch devastó Honduras, dejando a más de 900.000 personas sin hogar. Rigoberto fue reclutado para unirse al programa de ayuda y reconstrucción de la Misión, donde trabajó en la planificación y como enlace con las comunidades locales. Durante ese tiempo conoció al misionero de Missions Door Darryl Davis, que había regresado a Honduras para ayudar con el programa de ayuda a principios de 1999. La participación de Rigoberto en el ministerio de la Costa Norte de Honduras y en el Instituto Bíblico de Extensión le dio un verdadero deseo de dedicarse al ministerio. Después de completar su formación bíblica mientras trabajaba en los proyectos de socorro, sintió la dirección del Señor para trasladarse a Nicaragua y desarrollar el programa de plantación de iglesias por extensión allí. Esta fue una respuesta a la oración de Humberto Del Arca, quien había tenido una carga por Nicaragua durante muchos años.